FACU, está satisfecha por la condena que la jueza, de Zaragoza, ha impuesto y que puede calificarse como «avasalladora y acosadora» y que las llamadas perturbaban el descanso necesario por los horarios laborales del demandado y por sus problemas de salud, derivados precisamente «de la falta de este necesario descanso».
Era el año 2021 y se recibió una consulta y ante la reclamación de la insistencia por cambiar de compañía por parte de Vodafone, accedió a inscribirse en agosto del 2020 y nunca llegó a formalizarse la portabilidad, lo cual le genero problemas y ahí comenzó su tortura de la multitud de llamadas y correos electrónicos.
Desde FACU le recomendamos que recurriera a la mediación que desde la DGA y el Ayuntamiento de Zaragoza es posible realizar.
A pesar de ello no se lo solventaron los problemas y ante nueva consulta le sugerimos que sólo podía interponer una denuncia y así lo hizo y el 10 de febrero se publicó la sentencia.
David venció a Goliat y por ello nos sentimos satisfechos, que la Justicia haya obrado en consecuencia.
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