Los bancos son una fuente de quejas constantes en el Consumo y FACU. ¿Tener una cuenta corriente que cobre poco o, incluso, que devuelva dinero? Es difícil, pero no imposible: de hecho, está a tu alcance. FACU ofrece unos consejos para buscar una buena cuenta corriente que no te cueste dinero (e incluso recibas algunos euros al cabo del año).

1 Mas vínculos , mejores condiciones.

Los márgenes de beneficio de los banco se han visto reducidos por la política de bajos tipos de interés del Banco Central Europeo. Para contrarrestar esta caída de márgenes y tratar de aumentar sus beneficios, intentan conseguir clientes con mayor vinculación, que a la larga son más rentables. Para ello ofrecen condiciones más atractivas solo para los clientes con mayor vinculación.

Sin embargo, lo que las entidades entienden por «gran vinculación» es algo cada vez más exigente: ya no basta con tener la nómina domiciliada, sino que exigen además tener contratados otro tipo de productos, hacer un gasto mínimo con la tarjeta (caso del BBVA).

Tener una cuenta corriente en una entidad donde no cumples los requisitos de vinculación puede salirte muy caro, a pesar de la nomina domiciliada puede suponer  mas de 120 euros al año, a favor del banco.

2. Busca una cuenta que devuelva dinero

Sin embargo, hay cuentas que no solo no son caras, sino que son rentables, como es el caso de la Cuenta Nomina Bankinter que pueden dar un rendimiento de 250 euros al año en dos conceptos:

  • Pagar un tipo de interés sobre los saldos medios de la cuenta, una rentabilidad de hasta un 0,5 % anual.
  • Obtener la devolución de un porcentaje de algunos de los recibos domiciliados, siendo los más frecuentes los de luz, gas, teléfono fijo, teléfono móvil e Internet. 

3. Sin requisitos ni comisiones, solo online

Una de las opciones más atractivas es la que ofrece EVO Banco.

 4. No te lo gastes en el cajero

Evita pagar de más por tu dinero eligiendo bien dónde retiras efectivo. 

El último consejo sería que   te fíes de anuncios, ni tampoco de cualquier recomendación. Aunque sobre el papel una cuenta parezca la más rentable, pudiera ser que no lo fuera para tu caso concreto, o quizá tu banco te tenga reservado un trato especial

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