Los niños y adolescentes son un público especialmente sensible a la publicidad; su edad y falta de experiencia les hace ser muy susceptibles y dejarse influir por las prácticas comerciales. Por ello, se les considera consumidores altamente vulnerables.
En 2005 se firmó el Código PAOS (código de autorregulación de la publicidad de alimentos y bebidas dirigida a menores, prevención de la obesidad y salud) entre agentes de la industria de la alimentación y bebidas y el sector de la publicidad, con el objetivo de reducir la publicidad infantil de alimentos no saludables. Sin embargo, podemos decir que en la práctica apenas se ha notado. Estamos convencidos de que el carácter voluntario del código PAOS no ayuda a que se respeten los acuerdos y, por esta razón, defendemos que se exijan por ley.
Por eso desde FACU se quiere luchar en esa dirección y tomar iniciativas reales y prácticas en las que colaboren todos los afectados en la misma.
Comentarios recientes