Hemos hablado de la subida de combustible y la energía y desde FACU requerimos medidas eficaces y reales ante este problema, pero mientras nos olvidamos del butano que es el más utilizado especialmente por los mas vulnerables.
La nueva revisión del precio de la bombona de butano marca la novena subida consecutiva, algo realmente preocupante y alarmante y deja la bombona en 18,63 euros, el precio más alto que ha tenido nunca. Esta subida, no por esperada menos dolorosa, viene a sumarse a demás facturas energéticas, igualmente disparadas y descontroladas y se dejará sentir en millones de hogares.
En 2015 se adoptó el nuevo sistema de fijación de precios de la bombona de butano. Desde entonces, ese precio ha sufrido variaciones muy notables en poco tiempo si bien había una tendencia, un ciclo de precios anual, en el que los precios del butano tendían a subir en invierno y bajar durante el verano. Sin embargo, el pasado 2021 rompió todos los esquemas previsibles ante la impasividad del gobierno y es lo que desde aquí denunciamos, pues las sucesivas revisiones se tradujeron en subidas consecutivas. Y si 2022 comenzó con un máximo histórico, la segunda revisión del año, en marzo, bate todos los récords: en un panorama de subidas energéticas, el butano no es la excepción y la bombona se pagará desde mañana a 18,63 euros.
No es de extrañar y hasta previsible que pueda incrementar su precio hasta superar los 20 euros bombona, lo que podría traer un gravísimo problema que podría llegar a afectar a 16 millones de personas.
Una tendencia que no ha parado de crecer desde septiembre del 2020. Con la guerra de Ucrania y el la demanda energética puede llegar a costar en mayo entre 23 y 25 euros bombona, pudiendo bajar ligeramente a partir de junio por bajar su demanda.
Desde FACU se exige medidas de extrema urgencia para paliar esta situación.
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